Su inauguración fue noticia en el Diario de cádiz del 20 de diciembre de 1879 y su construcción se relata con todo lujo de detalles en uno de los Boletines Eclesiástico de la Diócesis de aquel momento:
Al comenzar el año 1879, la villa de Paterna de la Rivera se agrupaba en torno a la iglesia dedicada a Nuestra Señora de la Inhiesta que apenas resaltaba del resto del caserío, pues no tenía campanario. Fue entonces por iniciativa del párroco Luis Barjetón se propuso la construcción de una torre con reloj y campana; con ello se daba entidad religiosa al edificio sino que además se le dotaba de un servicio público como era el de dar a los vecinos a conocer la hora.
Se diseño una torre de planta rectangular, que fue levantada de forma desinteresada por los artesanos de Paterna y el reloj y su maquinaria fue encargado a una de las personalidades más reconocidas entonces en esta materia; se trataba de D. Tomás Otero y Picón, relojero de San Fernando y de su Capitanía General. El reloj paternero se dijo que fue " el primero que se ha construido con cuerdas metálicas en España para esta clase de relojes ". La esfera era de mármol (parece ser la que aún se conserva) con agujas y números romanos de bronce incrustados, con el año de su construcción 1879. Esta pieza pudo ser traslúcidas para gas ya que tenía la ventaja con ello de dar la hora durante la noche al hacerse visible, pero resultaba más caro.
La inauguración y bendición de la torre campanario y reloj fue presidida por el Obispo de Cádiz, Jaime Catalá y Albosa el 20 de noviembre de 1879, la fiesta siguió en el pueblo y "jóvenes de Medina animaron las calles de Paterna con una estudiantina, lo que continuó con la elevación de un globo"
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